El Septeto Turquino pone a bailar a Santiago en el Salón de los Grandes de la Casa de la Trova

septeto turquino

Todas las semanas, los sábados, el Septeto Turquino sigue ofreciendo su música en el Salón de los Grandes de la Casa de la Trova a las 8 de la tarde para que los santiagueros sigan bailando en tiempos de pandemia.

Los viernes a las 6 de la tarde el Turquino se presenta en El Patio de los Abuelos

El septeto turquino más conocido como los auténticos del son, iniciarán una peña el 22 de febrero en el Café Cantante del Teatro Heredia para promover la música tradicional cubana que cultivan hace más de 3 décadas.

Su representante Victor Pullés comentó que se tiene previsto invitar a deportistas destacados, artistas, intelectuales para que esta peña cultural sea un espacio de confraternización.

También conocimos que el Septeto Turquino se fundó en las aulas del Instituto Politécnico Julio Antonio Mella y cultiva la música tradicional cubana y cómo género característico defienden el son.

P: ¿Qué diferencia al Septeto Turquino de las agrupaciones con este mismo formato?

V.P: Creo que el trombón, el trombón porque fue incorporado por nuestro director Rolando Ferrer, que vio la necesidad de darle al grupo una sonoridad más fresca, agradable al son santiaguero y que tuviera más alcance a los jóvenes.

P: ¿Se nutren en sus interpretaciones de los grandes compositores de la música tradicional o es propia del grupo? VP: Nosotros nos nutrimos de la música tradicional cubana así como de la vieja trova pero también componemos temas en el grupo, especialmente del director del Septeto Turquino.

P: ¿Tienen un nuevo fonograma?

VP: El septeto Turquino cuenta con 8 discos y ahora promocionamos el último «Ligaditos con el son» que nos ha dado buenos resultados. También estuvimos recientemente en una gira nacional gracias a la empresa provincial de la música y gozamos de muy buena acogida.

La tradición de los Septetos en Santiago de Cuba no se detiene porque el Turquino enlaza composiciones de Ñico Saquito y Pepe Sánchez y le da una sonoridad capaz de cautivar a los bailadores. No en vano se les conoce como los «Auténticos del Son».

Por: Jorge Carlos Albear Brito.